La Meseta Checo-Morava es la región turística y natural más extensa de la República Checa. Su naturaleza está caracterizada por colinas onduladas, bosques tupidos, praderas verdes, superficies espejeantes de numerosos estanques, arroyos murmurantes y senderos bordeados de abedules y serbos. Por la meseta discurren numerosos ríos y arroyos que desembocan en el río Morava. Las colinas se hallan modeladas sobre granito y rocas calizas, de los períodos cretáceo y paleozoico, que han dado lugar a excepcionales formaciones calcáreas. Varios territorios de la meseta están protegidos como reservas naturales (p.ej. Montañas de Žďár). La meseta ofrece además de su belleza natural una rica cultura tradicional y muchos monumentos históricos.. En su territorio se halla p. ej. uno de los mejor conservados castillos medievales (Pernštejn), los más bellos castillos de los estilos renacentista e Imperio de Gran Moravia (Litomyšl y Kačina) y monumentos protegidos por la tutela de la UNESCO ( en Třebíč, Telč, Žďár, Kutná Hora y Litomyšl).
La Meseta es así mismo el sinónimo de las vacaciones activas - senderismo, montañismo, turismo de bicicletas, deportes acuáticos, esquí. La naturaleza exuberante está entrelazada por una densa red de rutas turísticas muy bien señaladas y senderos educativos. Los centros de esquí más destacados podemos hallar en la región de Montañas de Žďár , dónde hay kilómetros y kilómetros de pistas para esquís de marchas a fondo. Las cimas de Devět skal, Čtyři Palice y Dráteníčky son a su vez un paraíso para los montañistas.
